El equipo permite eliminar o disminuir las graves secuelas de la asfixia cerebral en los recién nacidos, bajando la temperatura cerebral y corporal de los menores a 33,5 grados.El equipo permite eliminar o disminuir las graves secuelas de la asfixia cerebral en los recién nacidos, bajando la temperatura cerebral y corporal de los menores a 33,5 grados.
  • Técnica de enfriamiento cerebral aplicada por Neonatología permite disminuir las secuelas que genera la falta de oxígeno en el organismo

El servicio de Neonatología del Hospital San Camilo incorporó una moderna técnica que permite eliminar o disminuir las graves secuelas que puede producir la asfixia cerebral en los recién nacidos gracias a la compra del equipo necesario para bajar la temperatura cerebral y corporal de los menores a 33,5 grados.

Este procedimiento requiere una compleja técnica que ayuda a reducir la inflamación cerebral que es provocada por la falta de oxígeno, por lo que junto con adquirir el equipo enfriador, fue necesario capacitar a todo el equipo por profesionales de la Clínica Las Condes en este procedimiento, además del cuidado del equipo y manejo del paciente.

«La asfixia aguda antes, durante o después del parto produce falta de irrigación y de oxigenación del cerebro, lo que genera destrucción o muerte de las células, pudiendo dañar muy gravemente sus funciones, con riesgo de mortalidad elevada o en su defecto, secuelas neurológicas como parálisis cerebral, retraso motor o epilepsia, entre otras», aseguró la Dra. María Angélica Martínez, jefa del Servicio de Neonatología del Hospital San Camilo.

Para la especialista, la prevención de la asfixia es fundamental, pero no siempre es posible y cuando ésta ocurre lo único que ha demostrado hasta ahora disminuir el daño es la hipotermia terapéutica, la que consiste en un enfriamiento cerebral entre 2 y 4 grados Celsius, es decir, a un promedio de temperatura de 33,5 grados Celsius, pero para que esto sea efectivo debe ser iniciado dentro de las primeras 6 horas posteriores al evento asfíctico.

«Cuando no contábamos con este equipo de hipotermia, intentábamos conseguir un cupo para ello en unidades complejas de Santiago o Valparaíso, públicas o privadas, con la demora que esto lleva, lo que involucraba un rápido traslado de este paciente, lo que en ocasiones no se lograba. Hoy llevamos cuatro casos y todos con resultados exitosos que nos permiten asegurar que entregamos un mejor servicio a nuestros pacientes», agregó la profesional.

Finalmente, la neonatóloga destacó que estos logros han sido gracias a un trabajo de todo el equipo del Servicio, sumando técnicos, profesionales y médicos, pues se requirió aprender nuevas técnicas, manejar otro tipo de pacientes y realizar diversos protocolos para hacerlo lo mejor posible. «Todo este trabajo ha valido la pena, pues los resultados obtenidos son más que satisfactorios y nuestros pacientitos han podido encontrar una solución a sus problemas acá en casa, con todo el cariño que nosotros les entregamos».

Dra. María Angélica Martínez, jefa de Neonatología.
Dra. María Angélica Martínez, jefa de Neonatología.
El equipo permite eliminar o disminuir las graves secuelas de la asfixia cerebral en los recién nacidos, bajando la temperatura cerebral y corporal de los menores a 33,5 grados.
El equipo permite eliminar o disminuir las graves secuelas de la asfixia cerebral en los recién nacidos, bajando la temperatura cerebral y corporal de los menores a 33,5 grados.