Matrimonio pasó de administrar lavandería a trabajar como delivery

Consecuencias de la pandemia:

Es sabido que a través de los distintos programas o noticieros de canales de televisión de nuestro país, se están mostrando diferentes historias de personas, en su mayoría profesionales, que debido a la pandemia han tenido que reinventarse para poder seguir subsistiendo de alguna manera. Hemos sabido de casos, por ejemplo, de un matrimonio de profesionales, un arquitecto con una diseñadora, que en este momento se dedican a vender verduras en una camioneta en una comuna del gran Santiago; asimismo, periodistas llevando adelante emprendimientos que no tienen nada que ver con lo que estudiaron. Todo esto se debe a que no hay por el momento disponibilidad en su campo laboral.

San Felipe no queda al margen de eso y caminando ayer en la mañana por nuestra ciudad, nos percatamos de una persona, un repartidor de Pedidos Ya, que venía saliendo desde una céntrica farmacia. Decidimos conversar con él sin saber que detrás de ese repartidor había una persona que hasta antes de la pandemia trabajaba junto a su esposa administrando una lavandería en calle Coimas, la que de un momento a otro vimos cerrada.

Al entablar conversación nos dimos cuenta de inmediato que no era chileno por su acento.

Se trata de Pedro Pablo Pérez Monteverde, de Venezuela, quien nos contó parte de su historia y el motivo que lo llevó a reinventarse junto a su esposa Giomar Martínez.

«Trabajaba en una lavandería que se llamaba Mister Jeff, es una sucursal de una lavandería y un spa, entonces producto de todo esto empezó a trabajar en octubre y todo esto de la pandemia se vieron en la obligación de cerrar porque no podían cubrir los gastos, sobre todo del arriendo y el personal, entonces vimos la oportunidad en Pedidos Ya de empezar a trabajar y empezamos a hacerlo así. En la lavandería trabajábamos mi esposa y yo, o sea nos quedamos ambos sin sustento», dice Pedro Pérez.

– ¿Qué edad tiene usted?

– 56 años, los acabo de cumplir ahora el 29 de junio, San Pedro y San Pablo.

– ¿O sea tuvo que reinventarse en el fondo?

– Sí, claro, tuve que reinventarme, tratar de reordenar gastos, de priorizar mucho más. Ahorita estamos cubriendo los gastos más básicos y hay algunos, por lo menos los que son recreación, bueno ya tampoco se puede hacer, pero yo tengo una niña de ocho años que también tengo que comprarle vestidos, zapatos, entonces claro, eso lo hemos postergado, hemos ido postergando gastos y todo eso.

– ¿Cuánto tiempo lleva trabajando aquí en Pedidos Ya?

– En Pedidos Ya estoy desde marzo, a principio de marzo.

– ¿Cómo le va, bien?

– Sí, realmente es una buena alternativa para cubrir los gastos y para no estar haciendo nada por supuesto.

Cuando lo entrevistamos, venía saliendo de una farmacia donde había ido a retirar un medicamento para llevarlo a la Villa Juan Pablo II de San Felipe.

Con la cuarentena en nuestra ciudad, es conocido que los pedidos a domicilio, ya sean de comida o productos, han aumentado en la ciudad de San Felipe.

Pedro Pablo Pérez Monteverde junto a su esposa, Giomar Martínez, que también trabaja en Pedidos Ya.